El bubble tea o “té de burbujas” es una de las bebidas que más furor está ocasionando en los últimos tiempos. Su textura y experiencia de consumo, diferente al resto de líquidos hasta el momento, hacen que esta nueva propuesta vaya tomando posiciones en el mercado. Veamos de qué está hecho y por qué está en el punto de mira de los fabricantes.
Bubble tea, la bebida exótica de moda
Lo cierto es que el bubble tea, también conocido como “té de burbujas”, “té de perlas”, o “té boba”, se ha convertido en una de las tendencias del momento a nivel mundial, especialmente entre los jóvenes y los adolescentes. La industria de bebidas, siempre pendiente de las preferencias de cualquier nicho de mercado, no pierde el tiempo. Si el bubble tea es lo que gusta ahora, se fabricará en grandes cantidades. En realidad ha llegado la verdadera revolución del bubble tea.
Se trata de una bebida que en su origen llega de Taiwán (allá por los años 80 y con plena expansión en la década de los 90) y que posteriormente se ha extendido a algunos sitios como Canadá, hasta el mítico China Town de Nueva York, y a otros sitios de Europa y por supuesto de Asia. Ni mucho menos hay que pensar que aun con su denominación es un té al uso, pero tampoco se trata de un refresco propiamente dicho. Es más “exquisito”, diferente a cualquier otro producto, y su principal atractivo se encuentra en su carácter exótico.
Su base por supuesto es el “té” especialmente seleccionado en cada caso (normalmente té verde o negro), al que se le añaden sabores distintos, atrevidos y capaces de causar sensaciones distintas y sobre todo divertidas. Se mezcla con frutas, zumos, yogures o leche, incluye bolitas de tapioca y se aromatiza con diferentes jaleas, azúcares o edulcorantes.
Existen más de 200 variedades de bubble tea. Se suelen servir en vasos de cristal o de plástico y con pajitas un poco más anchas para poder disfrutar al máximo de sus burbujas, y saborear las bolas de tapioca o esa especie de gominolas de gelatina.
El mercado del bubble tea, tan apetecible como sus burbujas
El mercado del bubble está creciendo exponencialmente en los últimos años. Según Verified Market Research, su volumen se valoró en 2020 en 1900 millones de dólares, y se prevé un crecimiento del 7,8% entre 2021 y 2028, hasta alcanzar en este mismo año los 4340 USD. Sin duda se convierte en un filón para la industria y la producción.
Ha cobrado gran popularidad, especialmente a través de los bares y cafeterías de los países del sur de Asia.
Según sus ingredientes, es el segmento de la fruta (fresas, mango, piña, melón, sandía, aguacate, maracuyá, coco, uva y plátano) el preferido por los consumidores.
¿Quién domina el negocio del bubble tea en el mundo?
El mercado global del bubble tea está básicamente dominado por varias empresas que lanzaron sus propias versiones.
1. Bubble Tea en el este asiático
Sharetea comenzó su andadura en 1992 en Taipei, y actualmente cuenta con más de 500 tiendas en 15 países.
Cha Time se inauguró en 2005, se expandió en 2009 a Australia, y posteriormente a nivel mundial. Cuenta ahora con más de 2.500 locales en 38 países.
CoCo Fresh (1997), DaBoba (2018) o Gong Cha (2006) son otros gigantes de esta bebida.
Por otro lado, está Happy Lemon Bubble Tea que se fundó en China y ahora tiene más de 1500 establecimientos.
2. Bubble Tea House Company
Es una compañía de Reino Unido que sirve y distribuye a bares y establecimientos especializados en bubble tea. Dispone de una gran variedad, como Wild Monk fáciles de mezclar, vegetarianos, sin gluten y de sabores naturales.
Además tiene otra gama bastante completa de productos y con una gran variedad de sabores.
3. Bubble Tea en EE.UU
USA tiene dos zonas importantes de población de origen taiwanés-estadounidense: California y Nueva York, dos de los epicentros culturales del bubble tea en América. Por enumerar algunas de las compañías más importantes en Estados Unidos, están, el Kung Fu Tea, que se fundó en Queens (Nueva York) en 2010 y que ya cuenta con más de 250 locales.
The Boba Guys o Tapioca Express también tienen sus sedes en California.
El desafío de la producción del bubble tea: el azúcar
Está claro que la fórmula del bubble tea gusta y mucho. Se puede comparar hasta con los helados, a los que ganarles la batalla contra las cantidades de azúcar que incluyen y las tendencias más saludables resulta casi imposible. Están deliciosos y se siguen consumiendo. Digamos que con el té de burbujas ocurre algo parecido, pero es cierto que los consumidores buscan fórmulas cada vez más sanas y libres de azúcares.
Por ello es determinante de cara a su elaboración y producción analizar y buscar esos ingredientes de mejor calidad, cuyas materias primas marquen la diferencia.
El bubble tea es algo más que una simple elaboración; puede llegar a convertirse en un arte cuyo objetivo es conseguir una consistencia y una textura perfecta sin grumos.
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