La kombucha se ha convertido en a alternativa perfecta frente a las infusiones y refrescos.
El té kombucha se presenta como una bebida fermentada, probiótica, hecha a base de un hongo de té, muy versátil para consumir en cualquier momento, y cuyos beneficios para la salud son … ¡todos! Pero, ¿se sabe realmente qué es?
Kombucha, la protagonista en redes
La kombucha, también conocida como té kombucha, es una bebida de las categorizadas sin alcohol, cuya elaboración es a partir de la fermentación del té, y cuyos resultados la convierten en una bebida muy refrescante y carbonatada. Al ser gaseosa, es perfecta para disfrutarla bien fría y consumirla en todo su esplendor con burbujas.
Lo cierto es que esta bebida procedente de las tendencias de Estados Unidos, no ha dejado de seguir ganando popularidad y captando nuevos seguidores.
La kombucha ¡Todo beneficios!
La kombucha no es de ahora. Nada menos que se remonta al año 220 a.C. Es una bebida fermentada, elaborada a base de té, azúcar y scoby (cultivo simbiótico de bacterias y levaduras).
Su líquido la convierte en todo un mix repleto de múltiples bondades. Es refrescante, perfecta para tomar en cualquier momento del día, muy baja en calorías y podemos encontrarla en diferentes sabores.
Si hablamos de beneficios, podemos decir que como la mayoría de bebidas probióticas, posee casi todos;. Contiene propiedades antioxidantes y antiinflamatorias. Es rica en un diferentes vitaminas (B1, B2, B3, B6, B12, C, D, E y K) y regula la flora intestinal o la palabra mágica “microbiota” que, sin duda, le hace sumar puntos.
Aunque, su evidencia científica sigue siendo limitada o en todo caso lo más parecida a las propiedades que ofrecen otros probióticos o el yogur, esta bebida ayuda a eliminar bacterias del organismo, reduce los niveles de colesterol, es buena para el hígado y los riñones, y el sistema inmunológico en general.
Recetas y múltiples fórmulas del té kombucha
Existen múltiples recetas DIY para elaborar el té kombucha en casa, pero lo cierto es que el volumen de su producción industrial ha crecido exponencialmente en los últimos años. Es fácil localizarla en los lineales de prácticamente todos los súper y tiendas, comprarla online o incluso beberla en la mayoría de bares, cervecerías y establecimientos.
Sus expectativas de crecimiento son muy favorables. Tanto, que según el análisis de Precision Reports, el ritmo constante se ha fijado en 2022 en 2086,4 millones de dólares, con unas previsiones bastante prometedoras, de alcanzar nada menos que un volumen de 6018,2 millones de dólares en 2028.
Algunos tipos de kombucha
El ingrediente estrella de la kombucha es el té, y dependiendo de la clase de té que se emplee para la receta, así como cada proceso de fermentación que cambia el sabor, se pueden lograr distintos tipos de kombucha.
Además, también se pueden añadir diferentes clases de fruta, vegetales o especias que aporten peculiaridad, convirtiéndola en una bebida de multitud de sabores. Aunque cada vez hay más variedad y los fabricantes apuestan por nuevos lanzamientos, entre los tipos más frecuentes están:,
1. Kombucha de té negro
Donde indudablemente el té negro es el ingrediente, y cuyos beneficios actúan directamente sobre la microbiota intestinal con potentes efectos antioxidantes.
2. Kombucha de té verde
Elaborada a partir de té verde, este té kombucha previene el envejecimiento y fortalece el sistema de defensas. Además contribuye a regular el proceso de digestión y regula los niveles de colesterol.
3. Kombucha de jengibre y limón
Esta bebida es muy refrescante que combina el toque picante procedente del jengibre y la acidez del limón. Es un buen aliado para eliminar la retención de líquidos y acelerador del metabolismo, mejora la circulación sanguínea gracias al magnesio y zinc procedente del jengibre, previene gripes y resfriados, y ayuda en las digestiones, con una gran capacidad de reducción de náuseas y vómitos.
4. Kombucha con frutos rojos
Como se le pueden incorporar gran multitud de frutas, los frutos rojos hacen que su sabor sea más dulce. La kombucha de frutos rojos es una gran fuente de antioxidantes, elimina toxinas del organismo, mejora la flora intestinal porque tiene un potente efecto probiótico y equilibra el metabolismo.
5. Kombucha de manzana
Es una de las propuestas más demandadas. El toque fresco y afrutado de la manzana complementa a la perfección con la acidez de la kombucha.
